Las condiciones inadecuadas de vida en un edificio desencadenan malestares e incluso patologías en el ser humano. Existen experimentos científicos que han demostrado que la falta de concentración e incluso los accidentes cotidianos están influenciados tanto por las altas como por las bajas temperaturas al interior de un espacio. Y aunque la sensibilidad térmica varía de persona a persona –dependiendo de su vestimenta, género, hábitos y edad–, los principios básicos detrás del confort térmico son universales. El confort térmico está determinado principalmente por la temperatura del aire y la humedad presente. En este sentido, el cuerpo humano busca mantener una temperatura corporal casi constante de 37°C, intercambiando calor continuamente con el medio ambiente.
El acondicionamiento térmico es uno de los factores más importantes para lograr el confort al interior de los edificios y, sumado a las condiciones arquitectónicas, contribuye a alcanzar el confort residencial deseado. Uno de los grandes problemas del confort ambiental es el diseño de viviendas que requieran de un alto grado de calefacción en invierno y de excesiva refrigeración durante el verano, entregando una mala calidad de vida y un elevado costo económico para sus habitantes.
Uno de los primeros elementos a considerar a la hora de abordar el confort térmico es la creación de una envolvente eficiente para el edificio, que actuará como filtro entre el clima exterior y el interior, estabilizando su atmósfera. La gestión adecuada de la envolvente da como resultado un interior bien equilibrado y reduce la necesidad de sistemas mecánicos. De este modo, mejorar las condiciones de los muros y techos conlleva a un menor costo energético y, en consecuencia, genera un hogar más eficiente energéticamente, favoreciendo la salud de todos sus habitantes.
Cuanto más duro es el clima, mayor es el nivel de aislamiento necesario para mantener la temperatura adecuada al interior de la vivienda. El análisis de la transmitancia térmica (valor U) permite conocer el nivel de aislamiento térmico en relación al porcentaje de energía que atraviesa la envolvente; si el número resultante es bajo, tenemos una superficie bien aislada. Por el contrario, un número elevado nos alertará de una superficie térmicamente deficiente. Lograr un equilibrio entre una casa bien aislada, con buenos niveles de luz natural, ventilación natural cuando sea posible y espacios con una estética agradable es un gran desafío para los arquitectos y diseñadores.
Etex Chile es un especialista mundial en materiales y sistemas para construcción en seco, y ha desarrollado soluciones constructivas que responden de manera sencilla pero eficiente a los requerimientos actuales de confort y habitabilidad de las viviendas. Estas soluciones son respaldadas por pruebas y certificaciones, adecuándose a las normativas actuales y anticipando el continuo desarrollo de este tema.
Así, los sistemas Permanit, Aquaboard, Cedral y Simplísima, acompañados de las lanas con barrera de vapor Romeral, barrera de humedad Cedral y Yeso Cartón Gyplac, forman una solución habitacional efectiva para el confort térmico. Las soluciones se adaptan a los requerimientos de cada zona térmica o el Plan de Descontaminación Ambiental vigente, con alta versatilidad para adaptarse a las necesidades de diseño de cada proyecto, con una relación costo beneficio acorde a las necesidades del mercado. Además, no reducen el espacio al interior de las viviendas, son fáciles de instalar y presentan una alta duración.
A continuación, presentamos un ejemplo de soluciones aplicables a diferentes requerimientos térmicos según la zona geográfica de Chile.